Limícolas arborícolas

Lo había visto en la tele, lo había leído en libros y en alguna que otra guía de pájaros, pero me faltaba el remate. Como todo en la vida, no hay nada mejor que contemplar las cosas in situ, por mucho que te cuenten, por mucho que imagines. Allí estaban, en la copa de los pinos, algunos limícolas, cual oteadoras rapaces, manteniendo el equilibro a duras penas con sus zancudas patas, haciendo música con el fluir del viento.

Andarríos bastardo en plena taiga